También llamada Ruta del Litoral de la Marina Alta, el Sendero Ecológico de Benissa es una propuesta del Programa de Senderismo de la Diputación de Alicante
Distancia: 9,2 kms Dificultad: moderada Desnivel: 230 mts
Horas de marcha: 3,30 hrs Tipo de ruta: circular
Hoy tenemos para vosotros una de las propuestas del Programa de Senderismo de la Diputación de Alicante: la ruta del Sendero Ecológico de Benissa. Aquí os ofrecemos una guía sobre los datos técnicos de la ruta y qué os vais a encontrar en ella.
El Paseo Ecológico de Benissa en Alicante es un sendero corto pero bastante espectacular. Transita entre hermosa vegetación, acantilados escarpados y varias calas de la costa de Calpe.
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El Paseo Ecológico de Benissa es fácil de recorrer, a ratos asfaltado, en otras partes de tierra, por lo que puedes transitarlo sin muchos problemas con niños, siempre bajo vigilancia, eso sí. Se camina por un sendero ancho, con una barandilla de madera y, en algunos tramos, por suelo y escalones pavimentados.
Como tiene forma de ‘sube y baja’, abundan en el paseo los escalones. Es por ello que no es adecuado para carritos de niños o sillas de ruedas. Durante el paseo encontramos sitios con sombra, bancos y merenderos para hacer un alto en el camino y reponer fuerzas.
El recorrido pasa por distintas calas que nos llevan a Benissa: Cala Mallorquí, Bassetes, Fustera, Pinet, Llobella, Advocat y finalmente Cala Baladrar, donde, al ser circular, volvemos por nuestros pasos.
Comenzamos la ruta del Sendero Ecológico Benissa
El recorrido se inicia en Cala Calalga, en la parte más sureña de la costa de Benissa. Desde este punto podemos contemplar al fondo el Peñón de Ifach. Solo la playa de la Fossa, de la vecina ciudad, nos separa de este.
Un panel nos recibe con información de la Cala de la Calalga y sobre las ventajas que ofrecen las playas no urbanas. Descendemos por una rampa de tierra y arena con baranda de madera hasta esta cala, la cual tiene muy poca orilla. Grava, acantilado, rocas y vegetación conforman la orilla de esta cala. Pero desde ahí la vista de toda la costa de Benissa y del Mediterráneo es espectacular, así como del Peñón de Ifach.
Subimos y tomamos una carretera asfaltada hasta llegar a un desvío en el que encontramos una casa en una esquina. Cogemos el camino de la derecha, siguiendo las indicaciones de un panel que nos orienta a Puerto Bassetes.
Este sendero de tierra está ubicado entre algunas viviendas por su lado izquierdo y por la derecha el acantilado con barandas de madera, adornado con tejos y mostajos, vegetación abundante por toda la costa.
Desde aquí y contemplando el mar, vemos la característica -no solo de estas costas sino de todo el mar Mediterráneo-, Posidonia oceánica, planta que con sus flores y hojas tiene sus praderas dentro del mar.
En el camino nos encontramos con otra cala virgen como la anterior: Cala del Mallorquí, la cual queda al fondo de un barranco y parece haber sido formada por un mordisco de la naturaleza.
Su orilla, poco extensa, está compuesta de grava, piedras, rocas y un acantilado que está repleto de tejos, palmeras y mostajos. A esta cala se baja por unas escaleras que parecen estar a medio hacer. Y es que la formación rocosa es tan complicada, que algunos escalones cedieron.
Aun así subimos y seguimos nuestro paseo por el sendero original. A los pocos pasos comenzamos a divisar el Club Náutico Les Bassetes que es un pequeño puerto con restaurante, cafetería y duchas, entre otros servicios.
Después de una pequeña parada, si lo necesitamos, subimos por una carretera que nos conduce hacia un sendero estrecho, pero precioso, que se encuentra entre montañas y árboles. Desde este punto se observa el Puerto Les Bassetes en todo su esplendor. El camino nos lleva hasta la hermosa Cala Les Bassetes, la más extensa de todas las del litoral de Benissa.
Aquí vemos enormes formaciones rocosas dentro del mar, amplias praderas de Posidonia oceánica, arena dorada, grava, acantilados, bosques de pinos, en fin, prácticamente toda la vegetación y formación características del litoral de Benissa. Además tiene maravillosas vistas tanto hacia la parte norte como sur de la costa.
Después de cala de Bassetes, retomamos el camino y, a escasos metros, nos encontramos con un hermoso merendero rodeado de tejos y mostajos.
Es un sitio ideal para descansar, refrescarnos y comer un aperitivo disfrutando de toda la belleza que nos brinda el paisaje.
Saliendo del merendero nos encontramos el Centro de Información Turística de Benissa Platja. Aquí disponemos de un panel con toda la información del Sendero Ecológico de Benissa, desde Cala Bassetes hasta Cala Baladrar.
Descendemos por unas escaleras y siguiendo un poco más divisamos la playa de La Fustera a cuyo fondo, desde la perspectiva en que nos encontramos, se ven unas pocas viviendas y variados servicios, como un chiringuito. En su costado norte hay un pequeño bosque provisto de mesas para picnic.
Esta es una buena opción para el que quiera comer allí y disfrutar de la vista que ofrece la cala. Esta playa posee Bandera Azul por lo que suele ser bastante concurrida.
La siguiente cala en el camino igualmente es hermosa y salvaje, rodeada de pinares y acantilados con fondos bastantes rocosos, pero ideales para el buceo. Nos referimos a Cala els Pinets. Desde aquí se puede pasar a otra pequeña, entre unas formaciones rocosas. En realidad son dos calas en una.
Abandonamos Pinets y subimos por unas escaleras para continuar el Sendero Ecológico de Benissa hacia nuestro próximo destino: la Cala de la Llobella. Esta es poco visitada, por su difícil accesibilidad, por lo que es ideal para aquellos que buscan paz y ambientes tranquilos.
Aunque es bastante pedregosa, desde su interior ofrece vistas espectaculares. Caminando hacia arriba, por su parte interna, se aprecia un bonito contraste entre un pequeño bosque de palmeras y pinos con un acantilado dorado.
Retomamos el camino del sendero, esta vez de tierra con abundante vegetación a los lados y algunas paredes de edificaciones a su costado. Nos encontramos con un muro empedrado en el que se anuncia el Paseo Ecológico de Benissa y la Cala Advocat.
Seguimos por la pista de grava entre frondosa vegetación. A continuación le sigue un sendero entre un bosque de pinos. Este es uno de los senderos más bonitos de todo el recorrido pues no tiene construcciones a sus lados.
Llegamos a un mirador desde donde se aprecia la Cala Advocat, la cual se distingue de las demás porque posee un espigón. Llegamos a ella bajando por el camino entre pinos hasta llegar de nuevo con un sendero entre construcciones y barandas de madera.
Es una cala que, por el rompeolas, no es muy honda, ideal para niños y con vistas estupendas a ambos lados y un enorme acantilado coronado de pinos. Cuenta asimismo con un parking para pocos coches.
Nos dirigimos hacia el final de la ruta, Cala Baladrar. Se trata de una cala bastante extensa y muy bonita, rodeada de enormes acantilados y toda esa vegetación y formaciones marítimas que encontramos a lo largo de nuestro recorrido. Esta playa también cuenta con bandera azul.
Si queremos hacer la ruta lineal y recorrer la mitad de distancia, aquí nos quedaremos. Pero podemos volver tras nuestros pasos y completar los 9,2 kms que nos ofrece estar ruta circular.
Termina así nuestro itinerario por uno de los senderos más hermosos de la Costa Blanca Mediterránea: la Ruta del Sendero Ecológico de Benissa.