Las obras en avenida de Beniardà continúan entre la calle Alcalá y Jaime I, y además se instalan dos grandes esculturas en la parte alta del nuevo túnel
Las obras de la avenida de Beniardà se han retomado este mes de septiembre, tras la pausa estival, con las últimas fases de la renovación de infraestructuras y mejora de la accesibilidad, y también con la instalación de dos esculturas monumentales. Completarán la reurbanización de la parte alta de la avenida, en el tramo sobre el nuevo túnel que ha servido para soterrar el tráfico y salvar el paso a nivel del TRAM.
Además de las esculturas, las obras que se retoman afectan al tramo comprendido entre la calle Alcalá y Jaime I. Más tarde, se ejecutarán las correspondientes a la parte alta, a la altura de la calle Capitán Cortés.
Sobre las esculturas
El autor de las dos obras escultóricas es el escultor Toni Marí, natural de Xàbia. Están realizadas en hierro, tienen 7 y 6 metros de altura, y un peso cada una de ellas que supera la tonelada. Representan dos figuras humanas, un hombre y una mujer, enfocadas cada una en una dirección para recibir o despedir a las personas que utilizan esta vía para entrar o salir de la ciudad.
En ambos casos, tienen las manos alzadas y sostienen sobre sus cabezas una gran gota de agua, en lo que pretende ser un homenaje de Benidorm a este elemento, uno de los bienes “más preciados y más valorados” para el municipio, como ha destacado el alcalde Toni Pérez.
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«Nos encontramos en la avenida de Beniardà, a escasos metros de la planta potabilizadora desde la que se distribuye el agua que bebemos en nuestro municipio y frente al inicio de la avenida de José Ramón García Antón, por eso, indudablemente, el agua tenía que ser el eje central«, ha dicho el primer edil sobre la temática de la obra.
Qué obras quedan pendientes en avenida de Beniardà
La urbanización de la zona de avenida Beniardà se ejecuta tras abrir al tráfico el paso inferior, el pasado mes de junio, cuatro meses antes de lo previsto.
Los trabajos de urbanización continúan en el espacio peatonal e incluyen jardinería, alumbrado, mobiliario urbano y otros aspectos necesarios para completar el espacio ganado para los ciudadanos en la antigua intersección de la avenida de Beniardá y el TRAM d’Alacant.
Así, se seguirá el modelo empleado en toda la calle en las fases anteriores con la formación de itinerarios mediante pavimento podotáctil, de botón y direccional, según marca la normativa de accesibilidad.
Además, el Ayuntamiento va a renovar las redes de agua potable y sus respectivas acometidas domiciliarias, ejecutará nuevas canalizaciones para servicios municipales y mejorará la accesibilidad de las aceras y escena urbana de la misma forma que se ha hecho en otras aceras.
Para minimizar las afecciones de las obras a vecinos y comercios, está previsto desplazar la parada de autobuses y la zona de carga y descarga a la manzana inmediatamente superior al cruce de calle Alcalá. A su vez, el acceso a los locales comerciales y viviendas estará en todo momento garantizado, salvo en momentos muy puntuales. La finalización de las obras, según las previsiones, se sitúa antes de terminar el presente año.
Así, la avenida Beniardá sigue su transformación en un bulevar, tras la supresión del paso a nivel, que ha permitido romper la barrera creada por las vías para acceder a la ciudad. Una vez finalizados los trabajos se habrán renovado alrededor de 3.500 metros cuadrados de aceras, 650 metros de canalizaciones de agua potable y 160 metros de colectores de aguas residuales.
