Uno de los miradores más visitados de la ciudad con vistas al mar Mediterráneo
Benidorm, la ciudad de los rascacielos, es conocida por sus playas, el ocio nocturno o el turismo entre otras cosas, pero también esconde rincones históricos, como el Tossal de la Cala o la Torre de les Caletes, de la que te vamos a hablar ahora.
Ambas torres tienen un vínculo entre sí, son dos torres vigía con el mismo tipo de fortificación que cumplían idéntica función, cada una desde una esquina de cada playa de la ciudad.
Situada en el Parque Natural de la Serra Gelada en Benidorm como punto estratégico, la Torre de les Caletes es un monumento histórico. Su papel de torre defensiva en el siglo XVI servía para proteger la costa de los ataques de piratas berberiscos procedentes del norte de África.
También conocida como Torre Punta de Cavall, fue construida por Juan Bautista Antonelli, el ingeniero del rey de la época. Antonelli fue el encargado de planificar la construcción y distribución del sistema defensivo del resto de torres vigías de la zona: torre de Aguiló (Villajoyosa), el Castillo de Benidorm y el Faro del Albir.
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La peculiaridad de esta torre que la diferencia del resto es su forma circular. En ella existe un cañón de hierro, 3 balas de artillería de calibre 7 y del 12 y una cureña de campaña. Domina dos calas, una por Levante y otra sobre Poniente; y la isla de Benidorm.
Su ubicación le permitía hacer una defensa costera y vigilar el tramo de litoral para alertar a la población en caso de ataque mediante fogatas. Antiguamente estas torres, estaban custodiadas por dos hombres a pie y otros dos a caballo.
Historia de la Torre de les Caletes
Hace más de medio siglo, el Mediterráneo vivió un fenómeno constructivo sin precedentes en la historia. Las orillas oriental y occidental fueron sacudidas por la guerra y por la conquista de naves corsarias procedentes de Argel y Túnez, instigadas por el Imperio Turco. Su objetivo era debilitar el conflicto por la hegemonía del Mediterráneo.
De ese modo, durante muchos años, la Torre de Les Caletes fue testigo de acontecimientos históricos: asedios, bombardeos, incendios… y pese a todos los daños, mantiene su resistencia.
La costa de Alicante conserva uno de los sistemas de torres de vigilancia y alerta solidaria más tempranos de las costas peninsulares.
En 2017 el Ayuntamiento de Benidorm solicitó al Servicio Provincial de Costas que ejecutara el proyecto de consolidación del acantilado sobre el que se levanta la torre y procediera a su restauración.
¿Qué hacer en la Torre de les Caletes?
Hoy en día se trata de un Bien de Interés Cultural y un atractivo turístico de la ciudad. Cualquiera puede acceder a la torre y realizar previamente la ruta de senderismo de 3,5km aproximadamente apta para cualquier público por su fácil acceso y poco desnivel.
En ella puedes presenciar restos de la estructura que pese a las restauraciones todavía se pueden apreciar los muros y elementos originales de la construcción. Y también disfrutar de exposiciones que se celebran temporalmente o contemplar las vistas panorámicas al Mediterráneo.
Cómo llegar a la Torre de les Caletes
La ruta para visitar la Torre de les Caletes comienza a partir del final de la Avenida de Europa en Benidorm desde donde debes subir en dirección a La Cruz de Benidorm.
Otra opción es subir desde el final de la playa de Levante por la calle del Alcalde Manuel Catalan Chana y a continuación por el pasaje 2 Américas hasta ver la señal de la ruta.
Señalizada en todo momento, se trata de una ruta de senderismo sencilla por un camino que bordea la costa. Además, en ella tienes la posibilidad de visitar dos calas de Benidorm: la Cala de l’Almadrava y la Cala del Tio Ximo.
